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El pasado 4 de Agosto comencé la temporada de anillamiento de cernícalos, la cosa empezó un poco floja. No ví cernícalos en alguna de las zonas, pero también hacía un poniente fuerte y con este viento los cernícalos andan locos volando de un sitio para otro. Conseguí capturar una hembra joven.

La siguiente jornada fue el día 7, cambia el tiempo a levante y la cosa mejora con tres capturas. A una de ellas (hembra jovén) le coloco uno de los dos dispositivos GSM que tengo previsto colocar este año y la bautizo con el nombre de "Mar", en el lugar de la captura junto al Morabito del Sarchal, en el Monte Hacho es una zona como casi todo el Monte Hacho donde la cobertura es escasa y en muchos sitios nula, así que hasta que no emprenda viaje no habrá muchos contactos.

El día 8 con el levante todavía fuerte los cernícalos no se ponen a tiro, ya que la mayoría vuelan a media ladera, el día después de muchas vueltas termina sin capturas. Para compensar vuelvo a ver a nuestro viejo amigo XA3 el cernícalo controlado desde hace más tiempo que tenga constacia hasta ahora. Este ave tenía un curioso comportamiento y es que me vió poner la trampa en la zona en la que él estaba y por las mismas laderas revoloteaban varios jóvenes, pues no paró de ahuyentarlos, parecía que quería evitar que vieran la trampa y pudieran caer en ella. También veo a Mar, revoloteando entre las Pitas detrás de las cigarras, parece que ni se entera de que lleva la "mochila".

El día 9, los cernícalos parecen dejarse ver por alguna de las zonas donde no los había visto en los días anteriores, esta jornada consigo dos capturas. En la bajada a playa del Desnarigado, un cernícalo macho jóven pone a prueba mi paciencia con sus continuas idas y venidas, posándose junto a la trampa una y otra vez, sin acabar de decidirse. Otros parece que no tienen ojos nada más que para las cigarras...........en fín gajes del oficio.