La Segunda "Bellotada" de Ceuta siembra esperanza: alrededor de 1.000 bellotas para recuperar los montes

Publicado en el diario El Pueblo de Ceuta el 16 de noviembre de 2024. Fotos: Reduan/El Pueblo de Ceuta.

Con el objetivo de recuperar los espacios verdes de la ciudad, los participantes sembraron bellotas de alcornoque, buscando restaurar los montes locales y concienciar sobre la importancia de estos árboles emblemáticos para la fauna y el ecosistema ceutí

La segunda edición de la “Bellotada Ciudad de Ceuta” volvió a llenar de entusiasmo y conciencia ambiental a la ciudad autónoma este sábado 16 de noviembre, con el lema "Cada semilla es el comienzo de un nuevo bosque". La actividad, que comenzó a las 10:00 horas en la pista de aeromodelismo, reunió a varios ceutíes, entre ellos familias, niños, adolescentes y adultos, todos con un mismo propósito: sembrar las semillas del futuro en forma de bellotas, y a la vez, sembrar la conciencia ecológica en las generaciones venideras.

Esta iniciativa, organizada por la Sociedad de Estudios Ornitológicos de Ceuta, se desarrolla con el objetivo de sensibilizar a la población, especialmente a los más jóvenes, sobre la importancia de cuidar y recuperar los espacios naturales de la ciudad, en especial sus bosques y montes. Aunque la actividad es principalmente educativa, está dirigida a todos los públicos y busca involucrar tanto a pequeños como a adultos en el proceso de reforestación.

Educación Ambiental y Reforestación Local

Julio Pérez, voluntario y uno de los organizadores de la actividad, explicó que la “Bellotada” es una oportunidad para enseñar a los niños sobre la ecología local y la importancia de los alcornoques. "Queremos que los niños comprendan de dónde viene la bellota, qué papel juegan los alcornoques en nuestro ecosistema y cómo la conservación de estos árboles puede marcar una diferencia en la biodiversidad local", indicó Pérez.

El alcornoque, considerado uno de los árboles más emblemáticos de Ceuta, ha visto una drástica disminución en su número en las últimas décadas. "Hace algunos años, Ceuta contaba con unas 500 hectáreas de alcornoques, pero actualmente apenas quedan 20", lamentó Pérez. La actividad busca concienciar sobre este grave problema medioambiental, subrayando el impacto que tiene la desaparición de estos árboles tanto para la fauna local como para las aves que dependen de ellos.

Un día ideal para sembrar

A pesar de las lluvias que suelen acompañar a este evento, este año las condiciones meteorológicas se presentaron como un aliado perfecto. "El karma parece estar de nuestro lado", comentó Pérez con entusiasmo. Al igual que el año pasado, cuando las lluvias llegaron justo después de la siembra, este 2024 el día nublado se mostró como el escenario perfecto para plantar las bellotas, asegurando que el clima acompañara el proceso de reforestación.

La actividad, que también se llevó a cabo el año pasado, busca sembrar alrededor de 1.000 bellotas en un entorno urbano, cuidadosamente recogidas en zonas urbanas para no afectar a la fauna local. Esta selección tiene como objetivo evitar la alteración de los hábitats naturales, como los de los alcornoques en los montes cercanos, permitiendo así que el proceso de reforestación se realice de manera sostenible.

Participación y compromiso comunitario

La “Bellotada” de este año también ha contado con una destacada participación de jóvenes de diversas instituciones educativas de Ceuta. Según Pérez, la estimación era que entre 80 y 100 niños de distintos centros educativos, escuelas de aventureros, scouts y asociaciones locales se unieran a la actividad. "Es muy importante que los niños se involucren desde temprana edad en este tipo de actividades. Ellos son el futuro y, a través de la educación ambiental, estamos plantando las semillas de un compromiso que perdurará", destacó el voluntario.

El evento también sirvió para fomentar el trabajo en equipo y la colaboración intergeneracional, ya que padres, madres y adultos acompañaron a los más pequeños, compartiendo experiencias y enseñanzas mientras sembraban las bellotas. El objetivo de la actividad es, además de recuperar los espacios verdes, consolidar un vínculo entre la comunidad y la naturaleza, para que cada participante se sienta responsable del entorno natural que lo rodea.

Un futuro verde para Ceuta

A lo largo de la mañana, se sembraron alrededor de 1.000 bellotas en las inmediaciones de la pista de aeromodelismo, un espacio cercano al centro urbano, pero en contacto directo con la naturaleza. La idea es que, con el paso del tiempo, las bellotas germinen y crezcan en nuevos alcornoques que, en un futuro cercano, contribuirán a la reforestación de los montes de Ceuta, ayudando a restaurar un ecosistema vital para la fauna local.

La “Bellotada” no solo se trata de un evento de reforestación, sino también de un llamado a la acción para la preservación de los recursos naturales de la ciudad autónoma. Cada bellota plantada es una oportunidad para que el bosque de Ceuta vuelva a crecer, para que nuestra fauna vuelva a encontrar su hogar y para que las generaciones futuras disfruten de un entorno más verde y saludable.

Este tipo de actividades no solo busca mitigar los efectos de la urbanización, sino también inspirar a toda la comunidad ceutí a tomar un rol activo en la conservación del medio ambiente, desde la base de la educación y el compromiso colectivo. La “Bellotada” de este sábado, sin duda, dejó una semilla de esperanza en todos los participantes, un símbolo del trabajo y la conciencia ambiental que, poco a poco, sigue tomando fuerza en Ceuta.